A pie y en bicicleta por el Continente Negro
Kazimierz Nowak
En noviembre de 1931 Kazimierz Nowak llega África. Desde Trípoli va a recorrer varios miles de kilómetros en dirección al sur en su vieja bicicleta. Su llegada al oasis de Maradah en el Sábado Santo de 1932 causa consternación entre los funcionarios a cargo del puesto. Nadie puede entender qué está haciendo un ciclista polaco en medio del desierto.
Durante la Gran Depresión el polaco Kaziemer Nowak pierde su empleo en una compañía de seguros de Poznań y decide dejar el país y a su familia para trabajar como corresponsal extranjero y fotógrafo. Realiza dos viajes en bicicleta por Europa, recorriendo Hungría, Austria, Italia, Bélgica, Holanda, Rumanía, Grecia y Turquía. En 1928 alcanza Tripolitania italiana en el Norte de África, que se encontraba en guerra. Aunque por problemas de salud y dinero se ve forzado a regresar a Polonia, toma entonces la determinación de cruzar algún día de norte a sur el continente africano.
El 4 de noviembre de 1931 Kazimierz Nowak parte de Poznań para cumplir su plan y el día 26 pisa de nuevo el continente africano. Desde Trípoli va a recorrer varios miles de kilómetros en dirección al sur en la bicicleta que tiene desde hace siete años y que merece toda su confianza. Su llegada al oasis de Maradah en el Sábado Santo de 1932 causa consternación entre los funcionarios a cargo del puesto. Nadie puede entender qué está haciendo un ciclista polaco en medio del desierto.
Viajando solo, Nowak a veces visita aldeas nativas para comprar comida o escuchar legendas locales. Se encuentra con tuaregs, fellahin en Egipto, los orgullosos watusi, los pigmeos babinga, boers de trasvaal, hotentotes, bosquimanos, primitivos abasalampasu, hausas y muchos otros exóticos habitantes del continente, todos unidos en la lucha por la supervivencia en un mundo en que la naturaleza impone sus leyes. A mediada que continúa su camino, el sonido de los tam-tam va extendiendo la extraordinaria historia del blanco solitario y su extraño vehículo.
Kazimierz Nowak (January 11, 1897, Stryj – October 13, 1937, Poznań) fue un viajero polaco, periodista y fotógrafo. Nacido en Stryi, vivió en Poznań tras la I Guerra Mundial. Entre 1931 y 1936 viajó por África en solitario a caballo, camello, barco, bicicleta o simplemente a pie, recorriendo más de 40.000 kilómetros de Norte a Sur (de Libia a Cabo Agulhas en Sudáfrica) y de regreso (a Argelia). Murió en Poznań pocos meses después de su regreso por causa de la extrema debilidad producida por la malaria y una operación quirúrgica. Sus fotografías fueron publicadas por su hija en 1962 en un álbum titulado Przez Czarny Ląd (A través de la Tierra Negra). En el año 2000 se incorporaron los textos escritos en sus viajes bajo el título Rowerem i pieszo przez Czarny Ląd (A pie y en bicicleta por la Tierra Negra). El periodista polaco Ryszard Kapuściński, que consideraba a Kazimierz Nowak “el maestro del reportaje de viajes”, descubrió en la estación de tren de Poznań, una placa en 2006 conmemorando el cincuentenario de su regreso de África por aquella misma estación.