Nuestro invierno africano
Arthur Conan Doyle
En noviembre de 1928, el creador de Sherlock Holmes, el detective más famoso del mundo, parte de Southampton (Inglaterra) con su esposa y sus tres hijos, Denis, Malcom y Billie, con destino a Sudáfrica.
En noviembre de 1928, el creador de Sherlock Holmes, el detective más famoso del mundo, parte de Southampton (Inglaterra) con su esposa y sus tres hijos, Denis, Malcom y Billie, con destino a Sudáfrica.
Se trata del cuarto y último de sus viajes —siendo destino de los anteriores Australia, Estados Unidos y Canadá— con el objeto de propagar por otras tierras las ideas espiritistas de las que se había vuelto defensor infatigable. Con este fin recorre, durante el que iba a ser el penúltimo invierno de su vida, —además de Sudáfrica— Rodesia, Mozambique y Kenia. La travesía de ida se inicia con un fortísimo temporal en el Golfo de Vizcaya, y vía Madeira y Cabo Verde arriba a Ciudad del Cabo. El retorno, por el Océano Índico y el Canal de Suez lo trae de regreso hasta Malta y la costa francesa. Los cinco meses que quedan entre medias constituyen esta peculiar y entretenida narración de aquel viaje.
Arthur Conan Doyle nació en Edimburgo (Escocia) en 1859. En su ciudad natal cursó estudios de medicina, especializándose en medicina naval en 1881. Ejerció su profesión primero en Porsmouth, donde practicaría diferentes deportes –rugby, golf, fútbol, boxeo- de forma semiprofesional, y luego a bordo de un navío mercante. Se casó por primera vez en 1885. Pocos años después se muda a Londres, donde ejerce la oftalmología con poco éxito, lo que le lleva a emplear su tiempo libre en la escritura. Tras el fallecimiento de su esposa se casa de nuevo en 1907. De ambos matrimonios tiene cinco hijos. Fallece en 1930 de un ataque al corazón. Es mundialmente conocido como padre del detective Sherlock Holmes.