El señor Lugrís y la negra sombra
Luís Rei Núñez
El recientemente descubierto diario de Urbano Lugrís, pintor genial, raro poeta y último bohemio, va desvelando –en una prosa apócrifa plagada de belleza, de humor, y de literatura– las sombras de los años de descenso a un abismo que no es aquí casi dramático, que es casi un abismo amable.
El recientemente descubierto diario de Urbano Lugrís, pintor genial, raro poeta y último bohemio, va desvelando –en una prosa apócrifa plagada de belleza, de humor, y de literatura– las sombras de los años de descenso a un abismo que no es aquí casi dramático, que es casi un abismo amable. Durante veinte años –los que separan su primer encuentro en Coruña en 1953 con el poeta Avilés de Taramancos, de su muerte en la indigencia en el Hospital Municipal de Vigo la víspera de nochebuena de 1973– discurren por estaambiciosa novela calles y bares, cuadros y poemas, proyectos y fracasos, y en definitiva, la fauna que opta por el exilio de la bohemia como la única vía de escape, en la inacabable invernía de un régimen injusto: el cantante Pucho Boedo, el futbolista Luis Suárez, el poeta Álvarez Torneiro, el bibliotecario y también poeta González Garcés, el escritor ligeramente desterrado Álvaro Cunqueiro, el pintor Alejandro González Pascual, el callista y compositor de himnos maestro Rey, la puta Amparito (“limpieza y ritmo en la cama”), van conformando en clara estirpe cervantina una gramática parda, un inventario de la vida.
Luís Rei Núñez (A Coruña, 1958), periodista de profesión y actual jefe de cultura de Televisión de Galicia, pertenece a la promoción que a principios de los años 80 tomó el relevo de los grandes escritores de las letras gallegas desaparecidos entonces; como Rafael Dieste, a quien dedicó una biografía en 1987. A lo largo de su trayectoria ha cultivado el ensayo ("Poetas andantes navegantes", 1995) y la poesía ("La casa en la bruma", 1997), aunque es más conocido como novelista desde que en 2000 recibió el Premio Xerais por "Expediente Artieda".